La actividad hotelera presenta un gran dinamismo y complejidad por su amplia variedad de actividades: servicios relacionados al alojamiento, gastronomía, lavanderías, alquiler de salones, recreativos, tiendas, alquiler de vehículos, etc., que además se ve afectada por una serie de factores exógenos que provocan que presente múltiples características en su desarrollo que influyen indudablemente en la forma de contabilización y presentación de la información financiera.

Siendo una actividad ampliamente distribuida a nivel mundial y con un interés particular de establecer lineamientos básicos sobre los sistemas de contabilización para hoteles, el American Hotel & Motel Association con la participación de la Asociación Hotelera de la Ciudad de New York, Asociación Internacional de Contadores de Alojamiento, Cadena Hotelera Carnaval Hotel y firmas de contabilidad como Peat Marwick y Deloitte, han desarrolla durante años lo que se denomina el Sistema Uniforme de Cuentas para la Industria del Alojamiento (SUCH).

Dicho sistema tiene como objetivos primordiales proveer a los usuarios internos y externos de los estados financieros de hoteles el análisis de la posición financiera y desarrollo operativo de la actividad mediante la recomendación de esquemas contables y nomenclaturas de cuentas en concordancia con las normas de contabilidad.

El SUCH recomienda que los gastos de la actividad hotelera se clasifiquen por la naturaleza o tipo de gasto y por las unidades organizativas del hotel, las tres grandes áreas organizativas que sugiere el SUCH son:

• Departamentos operativos que representan los costos y gastos directos de las actividades productivas del hotel (Alojamiento, Restaurante, Canchas de tenis, Gimnasio, etc.)
• Departamentos no operativos que son los centros de actividades que no reciben ingresos y representan los gastos indirectos de la actividad (Administración, Compras y Almacenes, Recursos humanos, Marketing, otros)
• Los gastos que corresponden a cargos fijos del negocio: seguros, alquileres, depreciaciones, amortización, intereses, etc.

El SUCH establece el método de costo por departamento o por área de presupuesto, calculándose para cada departamento el costo de la mercadería vendida, los salarios directos y los gastos directos del departamento, obteniéndose el resultado departamental. En el costo departamental no se incluye los cargos fijos, esto es lo que se conoce normalmente como costeo directo.

Lo referente a los costos y gastos de los departamentos no operativos el SUCH no recomienda distribuirlos entre los departamentos operativos, sino presentar por separado los gastos y salarios de los departamentos no operativos, así como los gastos fijos. La NIC 2 indica en su párrafo 16 referente a los inventarios de suministradores de servicios que en estos debe incluirse los costos directos y costos indirectos distribuibles. Los costos relacionados a ventas, personal administrativo se deben contabilizar como gastos del periodo.

Adicional a la estructura de costos recomendada por el SUCH se encuentra la basada en la obtención del “Costo Total”, que corresponde a la distribución sistemática y diseñada por medio de bases de asignación de los gastos no operativos y cargos fijos (actividad del denominador), a las actividades operativas, es importante recordar que debe haber una adecuada relación de la base con los costos indirectos, lo anterior es conocido en la bibliografía como Costeo Absorbente.

Para realizar una adecuada distribución se requiere un sistema contable apropiado e información estadística suficiente para realizar las correspondientes distribuciones.

Indistintamente del método seleccionado de costeo y contabilización se debe considerar las características esenciales que la información financiera debe tener para mantener relevancia: oportunidad, imagen fiel, comparabilidad, fiabilidad, comprensibilidad.

Lic. Marco Vargas Siles MIF
Contador Público-Especialista en materia Tributaria, financiera y contable